En el deporte nacional, la desorganización debería dejarse de lado, los reclamos de los clubes desnudan el manejo de la Confederación Paraguaya de Básquetbol (CPB).
Por Cristhian Pineda.
El básquetbol es uno de los deportes que en los últimos tiempos fue tomando forma y color en el Paraguay, se practica en varios clubes que compiten en el torneo metropolitano y otros certámenes. Sol de América, Libertad, Olimpia y San José, son algunos de los clubes que participan en este deporte de las canastas.
Como en casi en todos los deportes, la ambición y codicia llevan a algunos a ser corruptos. Esto en cuando en la parte dirigencial también ocurre una descoordinación. Es lo que está pasando en baloncesto nacional.
El reclamo de Sol de América sobre un jugador de San José, Ramón Sánchez, que agredió a un árbitro, cumplió una suspensión provisoria (5 partidos), habiendo quedado pendiente la determinación definitiva.
Libertad también decidió no participar en lo queda del torneo ya estaba en fase decisiva, específicamente debían disputarse las semifinales. Los gumarelos reclaman varios aspectos, como la falta de imparcialidad que desnuda totalmente el manejo de la Confederación.
Es una pena que un deporte como el basquetbol, que es valorado y practicado no solo en la capital sino también en otros departamentos, se maneje de esta forma. Faltaría un gran antídoto para borrar toda corrupción en los deportes nacionales.
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