Adriano "El Emperador", el jugador brasileño desapareció de la elite del fútbol mundial y nunca más pudimos volver a ver sus goles con la sutileza en cada de definición.
Por Cristhian Pineda.
Adriano Leite Ribeiro, más conocido como Adriano "El Emperador", fue unos de los tantos jugadores brasileños que vimos defiendo a la verdeamarela. Nació el 17 de febrero de 1982, en Rio de Janeiro.
Comenzó jugando en el Flamengo de su ciudad natal, con el que en una temporada fue ojeado por empresarios que lo llevaron a Italia. Fue al Inter, uno de los más grandes del Calcio. No se adaptó, por lo que fue cedido a la Fiorentina. Tampoco allí se mantuvo por mucho tiempo y de manera breve pasó al Parma, hasta que regresó al Inter en la siguiente temporada.
Definitivamente, "El Emperador" tuvo un mejor rendimiento, siendo una de las principales figuras del Inter, con el que ganó 7 títulos: 2 Copas Italia, 2 Scudettos y 3 Supercopas.
Años más adelante, Adriano demostraba su talento con su selección nacional, formando una nueva camada junto a Ronaldinho, Robinho, Kaká y otros más. Allí pudimos disfrutar de su talento con el balón.
Yo me decía por dentro 'será el mejor delantero después de Ronaldo Nazario o Pelé', ya que muchos me hablaban de esos jugadores brasileños que también se desempañaban como delanteros. No los vi jugar, pero sí, a Adriano "El Emperador". Muchos comentaban en televisión que empezó jugando como lateral izquierdo, y que su genialidad y potencia con la pierna zurda lo llevó a ser delantero.
Después del fallecimiento de su padre quedó con una depresión que no pudo superar. Ya no fue más "El Emperador” que todos conocían. Decayó en rendimiento futbolístico y también en comportamiento. Tampoco fue llamado nuevamente a la selección brasileña.
En el Inter de Milán ya no tuvo continuidad. Volvió a su país para jugar en Sao Paulo y luego nuevamente en Flamengo, donde lo habían visto nacer futbolíscamente. Ganó el Brasileirâo del 2009.
En 2010 nuevamente partió a Italia, donde pareciera que el Calcio le trae más que malos recuerdos, ya que pasó una pésima temporada.
Volvió al Brasil para jugar por el Corinthians y terminó su carrera en el Miami FC de la liga norteamericana. Fue la caída del "Emperador Adriano", que sufrió depresión y una serie de problemas personales de los cuáles nunca más se recuperó. Desapareció y no volvió más.
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