Carlos Sainz Jr. (ESP, Ferrari) se llevó la victoria en el Gran Premio de Singapur, 16ta fecha del Mundial de Fórmula 1. El madrileño consiguió su segundo triunfo en la categoría y terminó con la larga sequía del equipo de Maranello, que llevaba casi un año sin ganar.
Por Darío Fretes.
El fin de semana formulero comenzó con las habituales dos sesiones de prácticas realizadas el viernes, una por la tarde y la otra en la noche. Esta última con semejanza en cuanto al horario y al estado de pista, a las condiciones que reinarían en la prueba de clasificación y la carrera a disputarse en los días subsiguientes. Fueron las Ferrari de Carlos Sainz (ESP) y Charles Leclerc (MON) las más veloces del día (Charles lideró la primera tanda, Carlos la segunda).
En contrapartida, los reyes de la temporada, los Red Bull del bicampeón Max Verstappen (NED) y de Sergio Pérez (MEX) se enfrentaron a un escenario totalmente nuevo para ambos, con sus RB19 carentes de ritmo y con tendencia a un comportamiento indócil en la estrechez de las calles singapurenses. Todo esto en un renovado circuito callejero de Marina Bay, que contó con 4 curvas menos en comparación al trazado utilizado el año pasado (de 24 curvas y 5067 metros, se achicó a 19 curvas y un recorrido de 4940 metros).
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La nota de color del viernes fue la aparición de unas iguanas en medio de la sesión inicial. Asemejándose a la aparición de un ejemplar similar en la edición 2016, fue Verstappen quien, en comunicación por radio con su equipo, bautizó a estos reptiles como “los hijos de Godzilla”. Dicho mensaje fue reproducido por televisión a nivel mundial y desató las risas de los que seguían la actividad en la mañana paraguaya.
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En la sesión final de entrenamientos, ya en la tarde del sábado (mañana en Paraguay), siguió la tendencia dominante de Sainz, aunque esta vez no fue seguido de cerca por su compañero de equipo, quien quedó en el 5° lugar. Max, el Mercedes de George Russell (GBR) y el McLaren de Lando Norris (GBR) se interpusieron entre los dos Cavallinos. Pero, evidenciando los graves problemas de setup y hasta mecánicos que padecían los dos Red Bull, especialmente el del bicampeón, quien se quejaba constantemente de inconvenientes a la hora de subir y bajar las marchas. ¿Era el principio del fin de la larga racha de los toros rojos y del “León”?
La jornada de clasificación
Y llegó la hora de la qualy, ya en horario nocturno. Fue una prueba de clasificación muy movida, con la Q1 marcada por el tiempazo que clavó Yuki Tsunoda (JPN, AlphaTauri) justo antes de que Lance Stroll (CAN, Aston Martin) chocase de forma violenta a la salida de la curva 19 (y última), destrozando por completo su monoplaza.
Esto generó la bandera roja justo cuando el reloj llegó a cero en la sesión. Los hombres de McLaren, Norris y Oscar Piastri (AUS), evitaron con lo justo los escombros del auto destruido. Especialmente el británico, quien zafó de que la rueda que se desprendió del monoplaza verde impactase en su auto o incluso en su cabeza. Quedaron eliminados en esta ronda: Valtteri Bottas (FIN, Alfa Romeo), Piastri, Logan Sargeant (EEUU, Williams), Guanyu Zhou (CHN, Alfa Romeo) y Stroll.
Una vez que aficionados, pilotos y todos los involucrados en la Fórmula 1 recuperaron el aliento tras el golpe del canadiense de Aston Martin, se reanudó la sesión de clasificación con la Q2, que se desarrolló sin mayores inconvenientes, aunque con la gran sorpresa de la eliminación de los dos Red Bull.
“Checo” no pudo hacer su última vuelta rápida debido a un trompo en la curva 1, mientras que “Mad Max” apenas pudo ubicarse en el décimo lugar provisorio, para ser eliminado por el novato Liam Lawson (NZL, AlphaTauri). Este, en su tercera carrera sustituyendo al convaleciente Daniel Ricciardo (AUS), ya podrá decir a sus descendientes que eliminó con un monoplaza “inferior” a un bicampeón del mundo en una ronda clasificatoria.
Así, quedaban fuera de la pelea final por la pole: Verstappen, Pierre Gasly (FRA, Alpine), Pérez, Alexander Albon (TAI, Williams) y Tsunoda (sin tiempo marcado en la tanda).
Y para finalizar el sábado se vino una movida Q3, donde se vio la cara más dominante de las Ferrari en el año. Un desatado Sainz marcó el mejor tiempo al final de la sesión, estableciendo el récord de pista con un impresionante 1:30.984, dejando atrás a Russell por tan solo 72 milésimas y a Leclerc por 79 milésimas.
Norris y Lewis Hamilton (GBR, Mercedes) completaron el top 5. Los demás se acomodaron así, del sexto al décimo lugar: Kevin Magnussen (DIN, Haas), Fernando Alonso (ESP, Aston Martin), Esteban Ocon (FRA, Alpine), Nico Hülkenberg (ALE, Haas) y el novato Liam Lawson, en su primera Q3 de su incipiente carrera formulera.
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Y por fin llegó el domingo. Con la inesperada noticia de la baja de Stroll para la carrera, debido a molestias físicas que sintió durante el día tras semejante accidente. No pudo ser reemplazado debido a una situación reglamentaria y la grilla se armó con 19 autos. La única variante, aparte de la baja del canadiense, fue que Zhou debía largar desde la calle de boxes porque cambiaron el motor de su Alfa Romeo, rompiendo el régimen de parque cerrado.
En punto de las 8 de la mañana, hora paraguaya, se apagaron las luces del semáforo y dio inicio la carrera, con las Ferrari picando en punta y Hamilton cortando camino en la curva 1 para subir al tercer lugar. El heptacampeón debió ceder ese puesto ante Russell, no así con Norris, debido a que sí había superado al McLaren antes de la curva. El nipón Tsunoda fue el primero en caer en carrera, tras un toque con Pérez, que le dejó a su AlphaTauri con daños irreparables.
Sin embargo, fue un incidente sin abandono el que cambió la carrera. Fue un choque de Logan Sargeant contra el muro y los escombros que fue esparciendo en pista, lo que originó la salida del Safety Car y que casi todos los pilotos parasen para cambio de neumáticos, excepto los Red Bull y otros pilotos de la parte media-baja del pelotón. En ese lapso Alonso pisó la línea blanca del pitlane, lo que le valió una penalidad de 5 segundos. También se frustró la chance de doblete de los rojos, ya que, debido al tráfico, Charles solo pudo ubicarse en sexto lugar.
Tras el retiro del auto de seguridad, se relanzó la carrera,y los Red Bull pagaron su osadía al no entrar a cambiar ruedas como los demás, y comenzaron a caer estrepitosamente en el clasificador. Mientras que adelante, no pasaba gran cosa. Hasta que, a unos 15 giros del final, el Alpine de Esteban Ocon quedó trabado en 6ta marcha y obligó al cumpleañero piloto francés a estacionarse al final del pitlane y abandonar la prueba.
Esto activó el Virtual Safety Car, que aprovecharon los Mercedes y Fernando Alonso para hacer su segunda detención. Los hombres del equipo de Brackley salieron bien, pero el bicampeón español pagó sus 5 segundos y se les cayó el auto del crique durante el servicio, hundiendo las chances de Fernando y relegándolo al fondo de la tabla, saliendo del pitlane justo al relanzarse la prueba.
Las últimas 10 vueltas fueron de una incesante persecución de Russell y Hamilton hacia Leclerc y Norris. Y ahí se dio la jugada ingeniosa y maestra de Carlos. Solicitó a su ingeniero de carrera que le diese la diferencia que tenía con Lando, en vez de la diferencia con George, para darle DRS al piloto del auto “papaya”. Con esa jugada se mantuvo a cubierto de las fieras negras, que habían superado a un desgastado Charles. Y en la última vuelta, en su afán de asegurar al menos la segunda posición, Russell golpea el muro con la delantera derecha y termina chocando contra la barrera de neumáticos, echando por tierra sus chances de podio y/o victoria. El británico estuvo muy nervioso en la radio, y al borde de las lágrimas por tal chance desperdiciada.
Cayó la bandera a cuadros y Carlos Sainz ganó la competencia, obteniendo su segundo triunfo en la Fórmula 1, con un soberbio manejo. Lo acompañaron en el podio Lando Norris y Lewis Hamilton. Completaron la zona de puntos, del cuarto al décimo lugar: Charles Leclerc (MON, Ferrari), Max Verstappen (NED, Red Bull), Pierre Gasly (FRA, Alpine), Oscar Piastri (AUS, McLaren), Sergio Pérez (MEX, Red Bull), Liam Lawson (NZL, AlphaTauri) y Kevin Magnussen (DIN, Haas). Agregando a esto, “Checo” fue penalizado con 5 segundos por colisionar con Alexander Albon, sanción que no afectó a su octavo lugar final.
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Con este resultado se cortaron tres rachas: las 15 victorias consecutivas que obtuvo Red Bull desde el Gran Premio de Abu Dhabi 2022, las 10 victorias consecutivas de Max Verstappen que iniciaron en el Gran Premio de Miami (ambas duraron hasta el Gran Premio de Italia) y la temporada perfecta del equipo de Milton Keynes, que había ganado todas las carreras de este año. Otra vez, como en 1988, Ferrari arruinó la temporada de ensueño de otro equipo.
La próxima carrera se disputará este domingo 23, el Gran Premio de Japón, en el tradicional circuito de Suzuka. Prueba en la que Red Bull puede gritar campeón entre los constructores, si logra 1 punto más que Mercedes o 22 puntos más que Ferrari.
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